Este año El Cactus - Radiozine ha estado en el Groove Parade. Nuestros enviados especiales Zigor y Luis (nuestros expertos en música electrónica) nos cuentan en unas líneas sus vivencias e impresiones.

Novena edición del Groove Parade, y un cartelón como para perdérselo. Para empezar, un viaje un tanto accidentado (las cosas nunca salen como se planean) y una espera de tres horas en un atasco a la entrada del recinto (lo que nos impidió ver a Jeff Mills ni a Ritchie Hawtin, nada más y nada menos).
Al entrar nos encontramos con Laurent Garnier en el Paradise Tent. Buena sesión de tecno, que cuando comenzaba a derivar hacia terrenos house aproveché para acercarme a la Carpa San Miguel. Allí estaba pinchando LTJ Bukem, acompañado de Mc Conrad. Drum'n'Bass suavecito y poco ambiente. Más tarde en esa misma carpa el valenciano Dj Chola ofreció una sesión mucho más contundente, con un Mc Rakkamutafukka soberbio.
Nada mas terminar Laurent Garnier aparecieron en escena Youngsters, con un directo de tecno muy potente. Después de ellos pincho Ángel Molina, la sorpresa grata del festival para mi gusto ya que nunca le había visto evolucionar a los platos, y los escasos 20 minutos que estuve viéndole me supieron a muy, muy poco.
Nada mas terminar apareció uno de lo grandes triunfadores de la noche, Vitalic. Entro en escena a las 8:45, un acierto por parte de la organización por la manera en la que levanto el animo de la gente con su electro-tech. Directo demoledor, a pesar de las escasas producciones que tiene, que hizo que los 45 minutos que duró su set fueran muy intensos, sin que los temas perdieran fuerza en ningún momento. Y como gran postre, 'La Roc'.
Del Paridse Tent pasamos al Open Air (con asiduas escapadas a la carpa de drum'n'bass). Allí degustamos de los sets de Oscar Mulero y Misstress Barbara, ambos de un tecno demoledor, aunque en el caso de la segunda he de decir que esperaba algo más debido a las buenas referencias que tenia de años anteriores.
Para terminar Christian Varela y Marco Bailey pinchando a 4 platos y 2 mesas. Sin dejar que los temas sonaran más de 1 minuto, a una velocidad pasmosa, cuadrando los temas casi sin escucharlos....Se tomaron la sesión como si fuera una competición o 2 sesiones diferentes y lo más importante fuera pisar al compañero poniendo temas encima de los del otro. Un cierre perfecto.
El cuerpo ya no daba para más, y fue una pena porque nos perdimos el cierre en la Florida, y habría sido un gustazo ver pinchar electro a Dave Clark, y por qué no, a David Holmes.
Firmado: Zigor y Luis